El partido de mi vida: Pau Nebot (Castellón)

Pau Nebot en acción

Pau Nebot (Castellón) – El partido de mi vida imagino que sería el primero que jugué en nuestra liga, pero por suerte o desgracia no lo recuerdo, ya que desde entonces han sido, no tanto como yo hubiera querido, muchos partidos en estos años. Pero si alguno tengo claro es uno muy reciente ocurrido en el último Campeonato de España en Valladolid.

Todo transcurría una fría tarde de un 19 de Noviembre de 2011, en un salón del Hotel NH Ciudad de Valladolid. Para empezar el Campeonato por Equipos, el sorteo nos empareja contra una “Sede nueva”, sin experiencia en estos campeonatos, Madrid. Sí, lo mismo pensé yo. Esto es pan comido.

Pero si la cosa podía mejorar, mejoró. Yo que me plantaba allí sin apenas jugar desde Junio y sin aparecer por un Nacional desde el primer año en Madrid, la bolita fue caprichosa y me tocó un rival “asequible”, pero no para mi, un tal Javi Hernández, “Javi Parma”, todo un referente para cualquier jugador de fútbol-chapas que no voy a descubrirlo yo hoy.

Antes del partido le pido a Javi que estuviera relajado, que estábamos entre compañeros y su contestación me dejó mas tranquilo. “Hay que jugar hasta el final”, me dijo. Empieza el partido y me toca sacar a mi, ahí me coloco yo y Javi su defensa, saco y la pelota se queda perfecta para tirar a gol, pero si en algo no soy el Messi de las chapas es en los saques de centro. Pero me vi con ganas y dije la palabra mágica, “A GOL”. Javi y el árbitro (si no recuerdo mal era David Campón), se quedaron parados por mi manera de decirlo, todo emocionado de la ocasión que se me presentaba. Estaba seguro de que sería gol. Javi coloca el portero y me dice que tire. Lo normal es que no marque, pero disparé y la pelota entró y de qué manera.

El speaker, mira el campo y canta gol de Javi. Yo, todo indignado, ja ja ja. Levanto la mano y miro al campo de mi izquierda y veo a los hermanos Arquimbau, alucinando igual o más que yo. La cara de alegría que puse, según ellos, sólo sería comparable al día del nacimiento de mis hijas. Qué momento. En ese instante, me sentía como el REY del fútbol-chapas.

El partido se convirtió, a partir de los 10 segundos, en un ataque continuo, un acoso y derribo, con premeditación y alevosía, por parte de Javi, con la suerte para mi, de que no estaba muy acertado, hasta que llego el empate. Vaya golazo me hizo el tío, aún hoy no sé por dónde entró. Ahí acabó la primera parte, soñada por mi, con empate a uno, porque sabía que no podía aguantar ese resultado.
Pero la segunda parte empezó, casi, como la primera. Javi me hace una falta lateral y yo, creyendo que los milagros se repiten, volví a decir la palabra mágica “A GOL”, aún sabiendo que los lanzamientos de faltas y yo, no congeniamos mucho. Allá que voy. Tiro y el balón entró por toda la escuadra. No pude casi reprimirme y solté un pequeño grito y mire otra vez a los hermanitos y hacia la grada, donde estaban nuestros hermanos de La Solana haciendo fuerza.

Pero para mi, mi tiempo de gloria llegaba a su fin. Javi sacó todo su arsenal (que no sé si es legal, ja, ja) y cuando me di cuenta me metía 3 golitos de esos que sólo los CRACK’S saben hacer y ganaba 4-2 el partido.

Si antes de nuestro partido, tenía a Javi Parma como un Crack, después de ver lo que hizo conmigo, sube un peldaño más, si cabe. He visto a grandes jugadores en este tipo de partidos ser bastante maleducados, pero este tío fue todo un SEÑOR, porque hasta cuando perdía, me decía cosas que yo hacia mal, por lo que no creo que vaya a olvidar jamás este partido. Grande Javi.

Gracias a este partido, en el siguiente y decisivo para pasar a Cuartos de Final, contra el nuevo Club de Alcalá, salí muy motivado y gané 3 puntos muy importantes que sí, con la ayuda de mis compañeros de Equipo, nos permitieron clasificarnos para la siguiente ronda, que hacía años que no conseguíamos. Tras éste Campeonato por Equipos que realicé, me volví a sentir un grande del fútbol-chapas, volví a disfrutar como hacía tiempo que no hacía.